Mis Ganas. Vos ganas.

Y que ganas de decirte que te quiero conmigo.
Que ganas de ir y romperte el sueño con mis besos.
Ganas de ir a buscarte y decirte que
sin ti, mis días no tiene color ni sabor.

Ganas... ganas tu mis ganas y deseos mas profundos.
Ganas tu mi cuerpo con tus besos recorriendo
todos los caminos que me llevan a la locura.
Ganas...
Ganas locas de verte y sin miedo
desnudarte mi alma

Ganas de salvarme huyendo de ti.
Ganas de no saber quien eres.


Ganas.
Ganas porque ganas.

Aurora

Llegas.
Me miras y el deseo empieza a hablar sin palabras.
Nos escapamos del bullicio de la ciudad
y nos internamos en la oscuridad de una habitación.

Tu boca busca mis besos.
Mi lengua explora tu boca.
Recorres mi cuerpo liberando botones
arrancando mi ropa.
Desnudándome.

Tus dedos encuentran mis pezones,
los acarician, los pellizcan sin permiso.
Mi humedad se empieza a sentir.
Recorres mi vientre con tu lengua,
bajas,
muerdes
te recreas en entre mis piernas.

Tu boca. Tu lengua. Tus dedos. Mi humedad.

El mundo gira y estoy sobre ti.
Mis uñas acarician tu pecho. Tus manos envuelven mi cuello
y cortan mi respiración mientras mi cuerpo danza sobre ti.

Gemidos...
Gemidos...
Gemidos...

Cierro los ojos...
Hago implosión...
Estoy f l o t a n d o. . .
Mi mente se pone totalmente en blanco.
Mi piel se eriza.
Una gota de sudor frío recorre mi espalda.
Mi gélido cuerpo comienza a temblar
y mi río se desborda sobre ti.

Vuelvo a sentir cada centímetro de mi cuerpo.
Ven... estoy aquí... bésame.
Volvamos a respirar.

Pandora

Podría escribirte los versos
más bonitos del mundo.
Podría darte los besos mas dulces
que ningún amante haya podido dar jamás.
Podría pintarte un cielo violeta y
colgar de él la mas brillante de las lunas.
Podría darte un cofre lleno de ilusiones
y promesas salpicadas de magia y fantasía.

Podría... pero no quiero.

A ti quiero darte verdad.

Para ti, tengo mi realidad.
Tengo mis versos inconexos.
Tengo en mi boca los besos que
nadie más quiere.
Tengo un cielo lleno de tempestades.
Mis tempestades.
Para ti, tengo un día a día,
planes, tristezas, alegrías,  malos ratos,
romanticismo, locura, caricias indecentes
y miradas incandescentes.

Esta es mi vida.
Esta vida que ahora es tuya.
Esta vida que te ofrezco
y te muestro desparramada
por el suelo junto a nuestra ropa.

Si la tomas, tendrás de mi todo
lo que tu alma sea capaz de recibir.
Tendrás en tus manos ese universo
de pequeñas cosas que he construido en mi cabeza.

Si decides dejarlo pasar,
si decides que mi vida no es suficiente,
prometo no insistir.
Prometo dejarte.
Prometo levantar del suelo
mi realidad
mis lagrimas y
mi ropa,
largarme y no volverte a ver.